Fue la sorpresa del desfile militar en Francia: un soldado volando en una especie de patinete con un fusil en una de sus manos. Es la primera vez que se ve algo así en un evento tan importante como este, con el ejército francés en los Campos Elíseos para conmemorar la Toma de la Bastilla.

Y entre tanta solemnidad, apareció en el cielo Franky Zapata, campeón del mundo de 'squí acuático, quien trabaja con el Gobierno francés desde hace unos años. Apareció a bordo de un aerodeslizador llamado Flyboard, inventado por el propio Zapata, que se propulsa por cinco turboreactores, alcanza los 190 km/h y tiene una autonomía de unos 10 minutos.

El presidente francés, Emmanuel Macron, quedó prendado de este aparato la primera vez que lo vio y llegó a un acuerdo con Zapata para financiar su desarrollo con el objetivo de darle un uso militar. Así, el Ejecutivo francés ha invertido 1,3 millones de euros para perfeccionar el sistema. La idea no es solo que sea una vía de transporte o vigilancia, sino que también sea una plataforma de ataque si fuera necesario.

Aunque fue el 'soldado volador' el que asombró a los presentes con un vuelo rápido y preciso, los asistentes pudieron contemplar las últimas tecnologías de las que dispone el Ejército: drones, vehículos autónomos en miniatura y armamento antidron; unos 4.300 militares, 200 vehículos y más de 100 aparatos de las fuerzas aéreas francesas y de otros países europeos.