El actor estadounidenses Sean Penn ha contado más detal que su entrevista con el narcotraficante Joaquín Guzmán 'El Chapo', "fracasó", ya que no sacó a relucir el debate político de fondo sobre la guerra contra las drogas, que era su intención. "Mi artículo fracasó. Déjame ser claro. Mi artículo ha fracasado", ha contado Penn en una entrevista.

El actor ha subrayado que su intención era abrir el debate sobre el consumo y tráfico de estupefacientes, así como los efectos de la guerra contra las drogas que llevan adelante el Gobierno de EEUU y los de otros países. "Vamos a poner todo nuestro esfuerzo, nuestra energía, todos nuestros miles de millones de dólares sobre el 'tipo malo', y ¿qué ocurre? Tenemos otra muerte al día siguiente de la misma manera", indicó Penn.

En su conversación, el Chapo Guzmán recalcó que "el narcotráfico no depende de una sola persona. Depende de mucha gente. Si no hubiese consumo, no habría ventas".

"Vayamos a lo que queremos de fondo. Todos queremos que este problema de las drogas concluya. Somos los consumidores. Estés o no de acuerdo con Sean Penn, existe una complicidad", aseguró. Penn, ganador de dos premios Oscar, indicó que da igual si se está "en la derecha moral o la extrema izquierda", el caso es que "muchos de nuestros hijos toman drogas".

La revista Rolling Stone publicó la entrevista que el actor estadounidense realizó al capo del cártel de Sinaloa a principios de octubre pasado, cuando estaba prófugo. El artículo de Penn fue divulgado poco después de que Guzmán fuese capturado el ocho de enero en la localidad de Los Mochis, en su estado natal de Sinaloa y recluido en la prisión de la que se escapó por segunda vez hace seis meses. Desde entonces, el actor había mantenido silencio sobre las circunstancias del encuentro con el conocido narcotraficante, en compañía de la actriz mexicana Kate del Castillo.

Penn también rechazó que su entrevista con el narcotraficante facilitase su captura por las autoridades mexicanas, como han asegurado algunos funcionarios de México, algo que calificó como un "mito". Indicó, no obstante, que las autoridades mexicanas estaban "claramente muy humilladas por la idea de que alguien lo encontrase antes que ellos. No somos más inteligentes que la DEA o la inteligencia mexicana. Teníamos un contacto gracias al que fuimos capaces de conseguir una invitación", dijo. Por último, rechazó que sintiese temor por su vida, al poder haberse convertido en objetivo potencial del cartel de Sinaloa.