El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, comparece este viernes desde en las inmediaciones del paso fronterizo de Rafah, que conecta Egipto con Gaza, tras haberse reunido con el presidente de Egipto, Abdelfatá Al Sisi. Y lo hace poco antes de que comience la liberación de rehenes como parte del acuerdo de tregua con Israel. Preguntado sobre si España va a reconocer de forma unilateral el Estado de Palestina, Sánchez ha insistido en que "el momento ha llegado para la comunidad internacional, sobre todo para la UE". Y ha añadido que si no "España tomará su propia decisión".

Sánchez ha querido culminar así su visita, insistiendo con rotundidad en la necesidad de pedir a Israel un alto el fuego "duradero" y condenando que los bombardeos sobre Gaza están provocando la muerte de miles de civiles.

En su discurso en el paso de Rafah ha trasladado la "firme" condena de España a los atentados del 7 de octubre pero también ha advertido a Israel de que debe atenerse al derecho internacional "y este no es el caso". "La matanza indiscriminada de miles de inocentes, incluyendo miles de niños, es inaceptable, la violencia solo traerá más violencia", ha augurado.

"Debemos ofrecer al pueblo palestino un horizonte de esperanza", ha insistido Sánchez defendiendo la solución de dos Estados, y no solo la solución a la actual crisis. "Tanto Israel como Palestina deben estar presentes" en la conferencia de paz y toda la comunidad internacional debe implicarse, ha defendido. "Pero primero hay que poner fin a las hostilidades, España seguirá reclamando un alto el fuego duradero", ha reiterado.

A lo largo de su discurso ha insistido en varias ocasiones en dos objetivos: un alto el fuego permanente y el respeto del derecho internacional, "que no se está respetando, se habla de una respuesta desproporcionada por parte de Israel"; y una solución de dos Estados "a futuro". "Vivimos un momento internacional donde toda la comunidad internacional tiene que mostrar su apoyo a esa solución duradera", ha añadido.

Así, ha confesado que siente "frustración e injusticia" por lo que ocurre en Gaza. "La respuesta de Israel debe ser diferente, el respeto al derecho internacional humanitario, respeto por la vida de mujeres y niños que sufren la violencia. Debemos llamar a la democracia de Israel para que cumpla con sus obligaciones en materia de derecho humanitario internacional, y eso cae en el tejado de Israel", ha sentenciado.