La misa de Pascua ha tenido que celebrarse en la Iglesia de San Eustaquio tras el incendio de la catedral de Norte Dame, pero allí, se ha rendido tributo a los bomberos de París.

El obispo de París ha querido homenajear a quienes lucharon contra las llamas en el incendio de Notre Dame, en la capital francesa. En agradecimiento, les ha entregado una Biblia que pudo ser rescatada del incendio.