Un fallo técnico ha impedido que un total de 15.841 casos positivos de COVID-19 no hayan sido añadidos a tiempo al registro oficial de Reino Unido. Así lo ha reconocido el primer ministro británico, Boris Johnson, y el organismo público sanitario Public Health England (PHE).
El error ha supuesto que los contactos estrechos de las personas que han dado positivo no han sido informadas ni advertidas de que debían ponerse en cuarentena por su contacto con personas contagiadas. Esto podría conllevar una pérdida de más de 50.000 posibles casos de la enfermedad.
Algunos expertos y medios británicos señalan que más que un error técnico el problema reside en el programa que se utiliza para gestionar los datos, el Excel. Indican que se podría haber completado el máximo de columnas y filas que permite el programa.
Al respecto se ha pronunciado Max Roser, director de investigación en Economía de la Universidad de Oxford, que a través de su cuenta de Twitter ha explicado por qué se ha dado el retraso al conocer las cifras. "El motivo aparente ha sido que la base de datos se administra en Excel y el número de columnas había llegado al máximo", ha contado.
Concretamente, según ha informado el sistema de Salud del país la incidencia corresponde a los días que van del 25 de septiembre al 2 de octubre. Finalmente, estos datos han sido añadidos a las cifras reportadas el pasado sábado y domingo, 3 y 4 de octubre. Además, desde el PHE han asegurado que el problema informático ya ha sido resuelto.
"Comprendemos totalmente la preocupación que esto ha podido ocasionar y como resultado se han implementado nuevas medidas robustas", ha señalado el consejero delegado interino de PHE, Michael Brodie.