El linchamiento es, desde este martes, un crimen de odio en Estados Unidos. Y lo será bajo el título de Ley contra el linchamiento de Emmett Till. ¿Quién es Emmett Till y por qué esta ley lleva su nombre?

Para hablar de Emmet Till hay que hacerlo en pasado, pues fue falleció en el verano de 1955 tras ser secuestrado y linchado en el Estado sureño de Misisipi. El joven negro tenía 14 años y acababa de llegar al un pueblo rural, Money, para visitar a sus primos y tíos, según recogela web de la asociación que también lleva su nombre.

El joven acudió con sus primos y amigos a una zona comercial para comprar refrescos. Emmett Till compró chicle y salió de la tienda con Simeon. Cuando salieron de la tienda, Carolyn Bryant, la empleada blanca de 21 años y la esposa del dueño del negocio salió de la tienda. Emmett le silbó con un silbato de lobo. Según recoge el testimonio de la asociación, todos los presentes se sorprendieron de que Emmet se alejara inmediatamente de la zona. El joven hizo prometer a sus amigos que contarían nada de lo sucedido a su tío abuelo y a su tía Mose y Elizabeth Wrigh.

Sin embargo, el pequeño gesto del joven no quedó ahí. Cuatro días más tarde, aproximadamente a las 2:30 de la mañana, Roy Bryant, el esposo de Carolyn, y su medio hermano J.W. Milam, junto con otros hombres blancos y negros, secuestraron a Till en la casa de Moses Wright. Tras ser identificados por Carolyn Bryant, se marcharon en coche. Más tarde se dirigieron a un granero en Drew, Mississippi. Lincharon y golpearon brutalmente a Emmett Till.

Arrastraron su cuerpo hasta la orilla del río Tallahatchie, le dispararon en la cabeza, lo ataron con alambre de espino a un gran ventilador metálico de una desmotadora de algodón y empujaron su cuerpo mutilado al agua. Mose Wright se puso en contacto con el sheriff del condado de Leflore para informarle del secuestro. Bryant y Milam fueron detenidos el 29 de agosto y encarcelados sin fianza por cargos de secuestro. Tres días más tarde, apareció el cadáver de Emmett en el río muy descompuesto.

Su rostro estaba irreconocible. Mose Wright consiguió identificarlo por el anillo que llevaba en el dedo, grabado con las iniciales de su padre (L.T) y que le había regalado su madre antes de partir al encuentro de su familia. El asesinato del joven no pasó por alto en la sociedad estadounidense gracias a su madre, quien obligó a mantener abierto el ataúd de su hijo durante cinco días. Según recoge la asociación, miles de personas llegaron a la Iglesia para ver comprobar este brutal crimen de odio. El objetivo de la madre era que dejar ver al mundo lo sucedido. Algunos reconocen este acto como la mayor manifestación de derechos civiles en la historia de Estados Unidos.

Cuando comenzó el juicio de 1955 por su asesinato, el trágico desenlace había escalado y se había convertido en una fuente de indignación e indignación en todo el país. A pesar de ello, nadie ha entrado en prisión por la muerte de este pequeño. De hecho, el pasado diciembre de 2021 se cerró definitivamente el caso del joven por falta de pruebas suficientes, según recoge El País.

La historia de Emmett Till ha calado en la sociedad estadounidense hasta dar nombre al proyecto de ley para convertir el linchamiento en un delito federal de odio, un documento que llega tarde. Pero llega. Así lo reconoce el presidente de Estados Unidos, Joe Biden: "El odio racial no es un problema antiguo - es un problema persistente".

¿En qué consiste la nueva ley contra el linchamiento?

La nueva ley permite procesar un delito como linchamiento cuando dicha conspiración para cometer el delito de odio provoque la muerte o lesiones corporales graves, según explica el defensor del proyecto de ley, el diputado Bobby Rush, demócrata de Illinois, en declaraciones recogidas por The Associated Press. Así, la ley establece una pena máxima de 30 años de prisión y multas.

El proyecto ha contado con la aprobación de la Cámara de Representantes, por 422 votos a favor, tres en contra, y ocho miembros que no votaron, después de que el Senado lo aprobara por unanimidad. El Congreso consideró por primera vez una legislación contra el linchamiento hace más de 120 años. Hasta ahora se había fracasado en aprobar dicha legislación casi 200 veces, comenzando con un proyecto de ley presentado en 1900 por el representante de Carolina del Norte George Henry White, el único miembro negro del Congreso en ese momento.