La tensión internacional por el ataque militar de Rusia a Ucraniay las medidas de castigo económico impuestas por los países de occidente al país gobernado por Vladimir Putin podrían afectar a la colaboración en el espacio y más concretamente a la Estación Espacial Internacional.

Tras el anuncio realizado por Joe Biden este jueves en el que aseguró que la industria espacial rusa se vería comprometida por las sanciones, el director de la agencia espacial rusa Roscosmos, Dmitry Rogozin, lanzó un aviso a la comunidad internacional

"¿Quiere bloquear nuestro acceso a la microelectrónica resistente a la radiación para fines espaciales? ¿Quiere prohibir que todos los países lancen sus naves espaciales en los cohetes rusos más fiables del mundo? ¿Quiere destruir nuestra cooperación en la EEI?", se preguntó.

Acto seguido lanzó una amenaza. "Si bloquea la cooperación con nosotros, ¿quién salvará a la Estación Espacial Internacional de una salida de órbita descontrolada y una caída en Estados Unidos o... en Europa?", señaló Rogzin, que sugirió la "posibilidad" de que "una estructura de 500 toneladas caiga sobre India y China": "¿Quieres amenazarlos con tal posibilidad? La Estación Espacial Internacional no vuela sobre Rusia, por lo tanto, todos los riesgos son suyos. ¿Está listo para ellos?".

La EEI es una infraestructura espacial en la que colaboran la EEUU, la Unión Europea, Rusia, Japón y Canadá y sirve como un laboratorio de investigación en microgravedad permanente donde se realizan estudios sobre astrobiología, astronomía, meteorología o física.

Tras esas declaraciones del director de Roscosmos, la NASA se apresuró en lanzar un comunicado en el que llamaban a la calma y aseguraban que su compromiso con la agencia espacial rusa seguía intacto y que "no se planean cambios en el apoyo de la agencia para las operaciones en curso en órbita y estaciones terrestres".

Tras el comunicado de la agencia espacial norteamericana, Dmitry Rogozin ha asegurado que sus "preocupaciones han sido resueltas", aunque ha aseverado que siguen "analizando las nuevas sanciones estadounidenses" para "detallar" su "respuesta".