Rusia ha conmemorado su segundo Día de la Victoria desde que invadió Ucraniacon una nueva oleada de ataques contra el país vecino. Bombardeos que se producían tan solo horas antes de que Ursula Von der Leyen se reuniese con Volodímir Zelenski en Kyiv y de que Vladímir Putin arremetiese contra Occidente desde la Plaza Roja de Moscú, blindada por temor a posibles sabotajes.

El ataque perpetrado este martes, en el que las defensas ucranianas lograron destruir 23 de los 25 misiles lanzados por Moscú, es el quinto en lo que va de mes, tras un recrudecimiento de los bombardeos por parte del Kremlin, que la víspera lanzaba su mayor ataque con drones desde que estalló la guerra.

Entretanto, Rusia celebra este martes su fiesta nacional más importante, en la que conmemora la victoria contra la Alemania nazi en la Segunda Guerra Mundial. Una fecha que, en esta ocasión, se ha festejado entre fuertes medidas de seguridad, tras denunciar las autoridades rusas un presunto ataque contra el presidente ruso la semana pasada, del que responsabilizan a Ucrania y Estados Unidos.

Putin ha aprovechado la ocasión para cargar contra Occidente y denunciar una "auténtica guerra" contra Rusia al presidir el desfile militar en la Plaza Roja, mientras el pueblo ucraniano, ha defendido, se ha convertido en "rehén" de las ambiciones occidentales.

Un desfile en el que unos 10.000 soldados, entre ellos más de medio millar de combatientes en el frente de Ucrania, han desfilado en la capital rusa, donde los únicos líderes extranjeros presentes han sido los mandatarios de Bielorrusia, Armenia, Kazajistán, Uzbekistán, Kirguistán, Tayikistán y Turkmenistán.

Zelenski, con Von der Leyen en Kyiv

Este 9 de mayo es una fecha clave en la que el presidente ucraniano, a su vez, ha evidenciado aun más su distanciamiento de Moscú y dado un paso más en su acercamiento a la Unión Europea, al cambiar la celebración del Día de la Victoria, que la antigua república soviética solía festejar el mismo día que Rusia, al 8 de mayo, para celebrar en su lugar este martes el Día de Europa.

Una efeméride en la que, precisamente, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, ha desembarcado en la capital ucraniana para celebrarla junto al mandatario ucraniano y "preparar el terreno" para el inicio de las negociaciones de adhesión del país al bloque comunitario.

Todo ello, en un momento en que Ucrania ultima su contraofensivapara recuperar los territorios ocupados, mientras el conflicto no da visos de llegar a su fin ni se vislumbra la posibilidad de negociaciones de paz.