El sindicato mayoritario de Portugal, la CGTP, ha anunciado una semana de lucha entre el 16 y el 20 de diciembre contra los recortes de salarios y pensiones previstos en los presupuestos del próximo año que hoy vota el Parlamento.
Las protestas sindicales incluirán una concentración, el día 19 por la tarde, frente a la sede de la Presidencia de la República en Belém, para exigir la dimisión del Gobierno y la convocatoria de elecciones, dijo Arménio Carlos, secretario general de la mayor central sindical lusa.
"Es una vergüenza lo que está pasando en este país", afirmó el líder sindical tras defender, una vez más, el incremento del salario mínimo y animar a todos los portugueses a participar en las protestas convocadas en todo Portugal.
Estas concentraciones se producen después de que el Tribunal Constitucional avalase la norma que permite aumentar la jornada laboral de los funcionarios de 35 a 40 horas, una decisión que ha generado sorpresa y numerosas críticas entre la oposición y los sindicatos.
El Gobierno portugués, de signo conservador, propuso ese incremento de la jornada laboral a instancias de la Unión Europea (UE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI) como parte del programa de ajustes que aplica desde el año 2011 en contrapartida por su rescate financiero.