Toca decir adiós al turrón, a los langostinos, a los polvorones, al roscón... Es hora de ponerse las pilas con los propósitos de año nuevo por mucho que cueste.

Los agentes de la Policía de Bolivia ya se han puesto a ello. O, mejor dicho, les han puesto. El Gobierno les obliga a estar en forma. "Es necesario realizar un acondicionamiento físico", ha explicado Eduardo del Castillo, ministro del Gobierno de Bolivia.

El objetivo es entrar los uniformes y también servir y proteger mejor a la población.

"La clave es estar preparados para cualquier contingencia", apunta Jhonny Omar Chávez, coronel de las Fuerzas Especiales contra la delincuencia en Bolivia.

Algunos agentes lo dan todo en la preparación, pero otros hacen únicamente lo que pueden.

No obstante, también hay que reconocer que a ritmo de electropop hacer ejercicio es más llevadero. Alguno se ha quedado con la copla y no hay forma de pararlo.

Una clara puesta a punto de los cuerpos y fuerzas de seguridad bolivianos.