El español fue detenido por conducir una camioneta cargada de bombonas de gas. Fuentes de la lucha antiterrorista han indicado que estaba ebrio y, en principio, no tiene ningún vínculo con el terrorismo yihadista.
Aunque las fuentes precisan que todavía no existe "confirmación definitiva" que descarte el vínculo del detenido con el terrorismo yihadista, las bombonas que portaba en la furgoneta, que tenía matrícula española, serían para uso doméstico.
La Guardia Civil había avisado a las autoridades de Países Bajos de la "amenaza" de que se produjera un atentado en Rotterdam durante un concierto.
Tras ese aviso, las autoridades holandesas suspendieron un concierto de rock en la sala Maassilo, donde estaba prevista la actuación del grupo estadounidense 'Allah-las'. Según el alcalde de la ciudad, Ahmed Aboutaleb, el chivatazo era lo suficientemente serio como para no correr ningún riesgo.