La policía antidisturbios turca ha intervenido con gases lacrimógenos y cargas contra una marcha feminista del 8 de Marzo que pretendía manifestarse en la céntrica calle Istiklal de Estambul, tradicional lugar de concentraciones cívicas pero desde hace años cerrado a toda marcha reivindicativa.

Desde el mediodía, los agentes habían rodeado tanto la propia avenida peatonal como la adyacente plaza Taksim con vallas metálicas e impedían el acceso para evitar que grupos feministas desplegaran pancartas en esta zona. Más de 5.000 activistas se reunieron en una calle cercana, pero una hora más tarde marcharon hacia Istiklal, derribando una valla, a lo que la policía respondió con cargas, gas y forcejeos para empujar al grupo nuevamente calle abajo.

Entre los eslóganes, aparte de la pancarta de "Lucha feminista contra el patriarcado" destacaban mensajes contra el matrimonio de menores, contra la obligación de cuidar de marido, casa y niños, y de solidaridad con las mujeres inmigrantes. En la marcha se hallaban destacadas diputadas del partido socialdemócrata CHP y del izquierdista HDP, ambos en la oposición. A media tarde habían tenido lugar otras dos concentraciones feministas en sendos barrios de Estambul, previamente autorizadas por el ministerio turco del Interior, que terminaron sin incidentes.

Sin embargo, el Gobierno ha insistido que no permitirá el acceso de las activistas a la calle Istiklal, donde se celebró aún el año pasado, si bien entre fuertes medidas policiales, ni a Taksim, plaza emblemática para la izquierda turca, que lleva desde 2013 vetada a toda marcha de protesta. Pero la prohibición no ha desalentado a las activistas, entre cuyos lemas sobresale "La calle es nuestra" y "Nunca cederemos la calle a los hombres". En numerosas ciudades del países se han producido marchas feministas sin que se hayan registrado incidentes.

La historia se repite

Hechos calcados ocurrieron el 8 de marzo de 2019. La Policía turca tuvo que emplear gases lacrimógenos para dispersar una manifestación en el centro de la capital del país con motivo del Día Internacional de la Mujer.

Las fuerzas de seguridad bloquearon las calles que llevaban a la avenida Istiklal y cargaron contra aquellas personas que intentaron acercarse hasta allí.

En Pakistán han lanzado piedras contra las manifestantes

Miles de mujeres paquistaníes han marchado este domingo por las calles de todo el país en el Día Internacional de la Mujer frente a las pedradas lanzadas por grupos de islamistas y de ultraderecha que habían avisado de que interrumpirían por la fuerza el "obsceno" evento. "Destruyamos el patriarcado y liberemos a la población femenina de la opresión", ha proclamado la activista Farzana Bari durante un mitin en la capital.

Las mujeres marcharon en Islamabad frente a las piedras arrojadas por grupos de estudiantes islámicos, a pesar de la promesa de las autoridades de proporcionar seguridad para la concentración. Al menos una participante ha resultado herida por el impacto de una piedra antes de que la Policía controlara la situación, informa el diario 'Dawn'.

Contra las ordenanzas Zina

Las organizadoras de la marcha han dedicado la protesta a las "feministas que construyeron los cimientos" para anular una parte esencial de las llamadas Ordenanzas Zina, una normativa aprobada por el Parlamento nacional sin debate previo en 1979 que convertía la violación en un delito de adulterio punible hacia la mujer con una sentencia de muerte.

"Miles de mujeres acabaron encarceladas y las víctimas de agresión sexual no podían ser indemnizadas, dado que eran culpables de 'practicar sexo ilegalmente'", ha recordado el grupo. En 2006, después de años de lucha de las activistas, el Gobierno eliminó los aspectos de las ordenanzas referidos a la violación, pero mantiene otros apéndices que castigan a la mujer por mantener relaciones sexuales fuera del matrimonio.

La marcha de las mujeres

La Marcha Aurat, o Marcha de las Mujeres, organizada para celebrar el Día Internacional de la Mujer el 8 de marzo, se ha convertido en la mayor manifestación por los Derechos Humanos del país, y atrae a decenas de miles de participantes. Los grupos islámicos y los partidos políticos de derecha se opusieron a la marcha porque creen que los derechos de las mujeres solo están circunscritos a los límites que les impone el Islam.

La oposición a la marcha se intensificó después del evento del año pasado, que incluyó lemas como 'Mi cuerpo, mi elección', 'Mi cuerpo no es tu campo de batalla' y 'Deja de ser un fóbico menstrual'.

Los derechos de las mujeres en Pakistán van muy por detrás de los del resto del mundo, con el país en el puesto 151 de 153 países en el Informe del Índice Global de Brecha de Género 2020 del Foro Económico Mundial (FEM).