La polémica reforma de las pensiones de Emmanuel Macron sigue adelante. El Senado francés ha dado luz verde a última hora de este sábado al controvertido proyecto impulsado por el presidente galo, a pesar de las multitudinarias manifestaciones que se han sucedido en las últimas semanas en contra de esta medida, que eleva la edad de jubilación.

Los legisladores han dado el visto bueno al proyecto de ley con 195 votos a favor y 112 en contra, 'noes' que corresponden mayoritariamente a los grupos socialista, comunista y ecologista. La primera ministra, Elisabeth Borne, ha defendido que la medida, adoptada finalmente "tras 100 horas de debate", es "un paso decisivo para llevar a cabo una reforma que asegure el futuro" de las pensiones de los franceses.

Por su parte, el ministro delegado de Cuentas Públicas, Gabriel Attal, ha subrayado que la reforma tiene como "único objetivo" poder "seguir pagando próximamente 20 millones de pensiones cada mes". "Es por los franceses que no tienen otro patrimonio que su trabajo por lo que estamos trabajando para salvar este sistema", ha asegurado.

Protestas contra la reforma

Tan solo unas horas antes de su aprobación, un millón de personas se manifestaban en toda Francia contra la reforma del sistema de pensiones, según los convocantes, que precisaban que 300.000 de ellas se habrían concentrado solamente en las calles de París, si bien la Policía de la capital gala cifra en 48.000 los asistentes en la ciudad, mientras que el Ministerio del Interior ha confirmado 368.000 manifestantes en 251 concentraciones y manifestaciones en todo el país.

Ha sido la jornada con menor participación desde el inicio de las movilizaciones, hace ya siete semanas, lejos de los 963.000 del 11 de febrero o del récord de 1,28 millones del 7 de marzo, según cifras policiales. "Los días no se comparan, se suman", ha argumentado el secretario general de la Unión Nacional de Sindicatos Autónomos (UNSA), Laurent Escure.

El plan del Gobierno francés plantea elevar de 62 a 64 años la edad oficial de jubilación, ampliar los años de cotización necesarios para recibir la pensión máxima y eliminar los regímenes específicos que existen a día de hoy para ciertos sectores.