El Alto Representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, ha pedido el apoyo de los países del bloque comunitario para instar a Moscú a reanudar la iniciativa para la exportación de grano ucraniano y cesar sus ataques contra las infraestructuras agrícolas del país vecino.

"Si la comunidad internacional habla con una voz clara y unificada, Rusia podría reconsiderar y retomar su participación en esta vital iniciativa", ha indicado Borrell, en alusión al acuerdo para exportar cereal de Ucrania por el Mar Negro, en una carta dirigida a los ministros de Exteriores de los Veintisiete, citada por Efe. En particular, el jefe de la diplomacia europea pide el "apoyo" de los países "para instar a Rusia a volver a las negociaciones y que se abstenga de apuntar a la infraestructura agrícola de Ucrania".

Rusia y Ucrania llegaron a un acuerdo hace un año con la intermediación de la ONU y de Turquía para exportar cereal ucraniano a través del Mar Negro. El acuerdo fue extendido en marzo y mayo pasados, pero Moscú anunció el pasado 17 de julio que no lo renovaría, una decisión que, según advierte Borrell en su misiva, "agrava aún más la crisis alimentaria mundial, poniendo en riesgo a cientos de millones de personas vulnerables en todo el mundo".

Ataques rusos a la infraestructura agrícola y portuaria

Borrell denuncia asimismo que, aparte de retirarse del acuerdo, Moscú ha "estado destruyendo las instalaciones de almacenamiento de grano de Ucrania y la infraestructura portuaria con ataques dirigidos diarios desde hace más de una semana, no solo en el Mar Negro, sino también en el Danubio".

Estos ataques, alerta, están teniendo "efectos negativos", al elevar el coste de vida, sobre todo de las personas en países dependientes de las importaciones. "Esto es completamente inaceptable y debe ser condenado con firmeza por la comunidad internacional", asevera en su carta, en la que advierte de que ya se está produciendo un encarecimiento del trigo y el maíz y de que es probable que la mayor volatilidad de los precios de los alimentos persista en el futuro.

Según el jefe de la diplomacia europea, el principal beneficiario del bloqueo de la iniciativa es Rusia y su sector agrícola. Además, critica a Moscú por acercarse a "países vulnerables con ofertas bilaterales de envíos de granos a precios reducidos, pretendiendo resolver un problema que ella misma creó". "Es una política cínica utilizar deliberadamente los alimentos como arma para crear nuevas dependencias al exacerbar las debilidades económicas y la inseguridad alimentaria mundial", asevera.

El responsable de la diplomacia comunitaria señala en la carta que la UE espera que Rusia "reconsidere su decisión" y que, mientras tanto, está "plenamente comprometida con encontrar soluciones". En ese contexto, indica que los Veintisiete seguirán apoyando los esfuerzos de la ONU y Turquía para reanudar el acuerdo de grano del Mar Negro y que se continuarán reforzando los "carriles solidarios" como rutas alternativas para las exportaciones agrícolas ucranianas.

Además, la UE tiene previsto aumentar el apoyo financiero a los países y personas más necesitados con 18.000 millones de euros a fin de garantizar la seguridad alimentaria hasta 2024, centrándose en las regiones más vulnerables.