El hombre que manejaba el timón del barco hundido. Mohammed Alí Malek, tunecino de 27 años, a su llegada al puerto de Catania. Muestra un rostro que prueba que poco le preocupa la situación. A su lado, se encuentra su subalterno, sirio de 25 años, con capucha. Parece querer esconderse de los objetivos. Ya en tierra son detenidos. Acusados de los delitos de homicidio culposo múltiple, naufragio e instigación a la inmigración clandestina.
El patrón del barco que naufragó se escondió entre los supervivientes