El Papa Francisco vuelve a dar la sorpresa y convierte un local de Burger King en sacristía, para prepararse antes de esta misa multitudinaria en Bolivia, donde precisamente criticó el consumismo y pidió que se luche contra el hambre. El Pontífice ha pedido perdón por los crímenes en Amércia Latina y durante un encuentro con movimientos sociales, se ha puesto el sombrero típico y el casco de minero.
El Papa Francisco utiliza un Burguer King como sacristía en su visita a Bolivia