El director de Emergencias Sanitarias de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Mike Ryan, ha afirmado que reabrir las escuelas en aquellos países donde la transmisión del coronavirus aún sea alta "sólo empeorará la situación".

Mientras aumentan las dudas en muchos países sobre la viabilidad de reiniciar el curso escolar, después de que el anterior quedara parcialmente interrumpido por la pandemia, Ryan aconsejó que esto se haga sólo si los niveles de contagio son bajos y hay preparadas medidas de reacción en caso de aparición de positivos en las aulas.

"Todos queremos que los niños vuelvan a clase", aseguró el irlandés, aunque es necesario que "ellos y los profesores lo hagan en un marco seguro", añadió, en una sesión de preguntas de internautas retransmitida por la OMS a través de las redes sociales.

Preguntado sobre si los padres de niños con problemas de salud previos deben llevar o no a sus hijos a la escuela en caso de que las clases se reanuden, Ryan subrayó que ello dependería de los preparativos de cada escuela, por lo que pidió que se consulte a los responsables de cada centro educativo antes de hacerlo.

De la misma forma, los profesores con dolencias crónicas u otros problemas de salud deberían consultar con sus médicos a la hora de decidir si tomar o no precauciones a la hora de acudir a su trabajo, añadió la directora técnica de la OMS en la respuesta contra la COVID-19, la estadounidense Maria Van Kerkhove.

Plantea a los jóvenes si "es necesario" salir de fiesta

Además, Ryan ha vuelto a dirigirse a los jóvenes ante el aumento de la transmisión de la COVID-19 en esa franja de edad. Les ha pedido que actúen con responsabilidad y se pregunten "si hay que ir a fiestas" y otros eventos masivos. Además, también se ha pronunciado sobre la reapertura de escuelas, lo que considera un riesgo en los países con mayor transmisión.

"Preguntaos si necesitáis ir a esa fiesta, a esa discoteca... si la transmisión comunitaria es baja, el riesgo también lo es, pero en zonas donde es alta, todo el mundo está en peligro", ha advertido Ryan en una sesión con preguntas de internautas emitida por la OMS a través de las redes sociales.

"Necesitamos trabajar juntos para reducir los riesgos, y los jóvenes tienen un importante papel para que la transmisión baje", subrayó Ryan, quien indicó que, mientras las poblaciones de mayor edad siguen actuando con mucha cautela, la juventud, con ganas de regresar a la normalidad social, es ahora un importante vehículo de transmisión.

El experto irlandés insistió de todos modos en que cuando se producen focos de la COVID-19, sean entre jóvenes o no, "hay que evitar la búsqueda de culpables", aunque sí criticó a quienes rehúsan dar información de contacto o sobre su estado de salud en el contexto de la actual pandemia.

"Algunos tienen miedo de que sus amigos sepan que son un caso positivo, pero en la lucha contra el virus es importante que, cuando un problema ocurra, nos involucremos y todos participemos en su solución", aseguró.

Ryan recordó que, aunque muchos de los casos de la COVID-19 en jóvenes suelen ser menos graves que en personas de mayor edad, siempre puede haber excepciones, especialmente en quienes padecen dolencias crónicas u otros problemas de salud previos.

"Las autoridades deben crear ambientes para que las actividades de la juventud sean seguras y se reduzca el riesgo de transmisión, pero los jóvenes también tienen que asumir responsabilidades", concluyó.