Las fuerzas de seguridad turcas han encontrado los cuerpos de tres refugiados afganos que murieron aparentemente por hipotermia en Edirne, provincia del noroeste de Turquía limítrofe con Grecia.

Los tres cuerpos congelados fueron hallados por un gendarme turco en dos aldeas de Meriç, en la zona fronteriza con Grecia, y enviados al Instituto Forense de Estambul para determinar sus identidades y la causa exacta de la muerte.

Un migrante afgano enviado de regreso de Grecia a Turquía dijo a la Policía que había visto a los tres migrantes en un campo de refugiados heleno y que fueron obligados a regresar a Turquía sin ropa de abrigo, según ha informado el canal CNNTürk.

En un acuerdo con la Unión Europea sellado en marzo de 2016, Ankara se ha comprometido a aceptar a todos los inmigrantes y refugiados llegados de forma irregular a las islas griegas.

A cambio, además de un pago de hasta 6.000 millones de euros para ayudar en la acogida turca de refugiados sirios, el club comunitario debe recibir a un refugiado sirio por cada sirio devuelto a Turquía.