Un nuevo vídeo muestra a tres policías arrodillados sobre George Floyd mientras el hombre grita 'No puedo respirar'. Estas nuevas imágenes de la detención, desde otra perspectiva, demuestra que fueron varios los agentes que se abalanzaron sobre él provocando su asfixia.

Tres agentes arrodillados sobre George Floyd mientras éste grita: "No puedo respirar".

Hasta ahora se habían difundido las imágenes en las que un agente, junto al coche patrulla, está arrodillado sobre el cuello de George Floyd. Pero este nuevo vídeo muestra una imagen más completa de lo sucedido.

Además, otro vídeo captó los instantes previos en la detención, en los que parece que se produjo una pelea y un forcejeo en el interior del coche patrulla entre Floyd y los agentes. Se trata de minutos antes de que los agentes lo tumbaran sobre el asfalto.

La Policía de Mineápolis detuvo a este hombre afroamericano por usar un billete falso en un supermercado. Los agentes defienden que Floyd opuso resistencia cuando se disponían a detenerle en su coche y justifican así la violencia empleada. Sin embargo, otras imágenes también demuestran que la víctima no opuso resistencia a la autoridad cuando fue interceptado.

Testigos de lo ocurrido imploraron incluso a uno de los agentes para que dejase respirar al hombre tendido en el suelo. "Quítale la rodilla del cuello, comprueba su pulso. No está respirando, ¡comprueba su pulso!", le pedían mientras Floyd moría asfixiado.

Derek Chauvin, uno de los agentes implicados, ha sido acusado de asesinato en tercer grado y de homicidio imprudente, según informó el pasado viernes el fiscal del condado de Hennepin, Mike Freeman.

Este agente llevaba 19 años trabajando para la Policía de Mineápolis y fue destituido tras confirmarse la muerte de Floyd. El resto de agentes implicados en la detención llevaban menos de tres años en el departamento y fueron despedidos al día siguiente.

Este nuevo caso de brutalidad policial ha originado una oleada de protestas y graves disturbios en EEUU. En Nueva York, la violencia policial del pasado sábado tuvo respuesta en sólo 24 horas, con saqueos en las tiendas de moda del Soho y en múltiples establecimientos.

Mientras en Washington, por tercer día consecutivo, los manifestantes se concentaron frente a la Casa Blanca y en otros puntos de la ciudad, ignorando el toque de queda decretado en la capital. Así, y haciendo frente a la Guardia Nacional, los manifestantes encendieron hogueras en las zonas adyacentes a la Casa Blanca, incendiaron algunos comercios y atacaron con piedras y otros objetos las fachadas de varios establecimientos.

Las protestas en Atlanta acabaron en un nuevo episodio de violencia policial por el que han sido despedidos dos agentes. Dos estudiantes negros fueron arrestados después de que la Policía interceptara su vehículo. En el vídeo de la detención se muestra cómo los agentes destrozan la ventana del conductor, abren a la fuerza su puerta y disparan a la pareja con pistolas eléctricas.