Nicole tiene 12 años y está cruzando Europa para huir de la guerra de Ucrania. Ha abandonado su país natal y se dirige a Gijón, donde lleva seis años pasando los veranos y su familia de acogida está desesperada para tenerla bajo su techo.

Cuando comenzaron los bombardeos la semana pasada su madre quiso ponerla a salvo de la guerra y ahí es donde entra Paula, su madre de acogida. Es ella quien se ha encargado de la niña cada verano desde hace seis y, en pleno estallido bélico, quien quiere sacarla del país.

De Kiev, la niña ha conseguido llegar a Moldavia y la idea era que de allí partiera a Gijón. Pero el viaje está siendo una odisea ya que el chófer que debía llevarla al avión en dirección a Gijón se echó atrás y Nicole se quedó sola. Sin su familia, con desconocidos y en un país extranjero.

Paula cuenta que pasó la frontera con unas familias con las que había contactado su madre. Y, desde entonces, está acogida por una familia en Moldavia, donde permanecerá hasta que consigan traerla a España de manera segura.

Pero aún falta documentación ya su pasaporte se quedó en Kiev y pide a la Embajada que la permitan salir y entrar en el país. Paula se emociona al leer el último mensaje de la madre de Nicole: "Si me pasa algo, por favor, cuida de Nicole".

Si nada surte efecto, Paula está preparada para ir a buscarla a Moldavia.