El empresario, líder de Forza Italia y tres veces primer ministro italiano, Silvio Berlusconi (1936-2023), ha muerto a los 86 años en Milán, su ciudad natal. Enfermo de leucemia, Berlusconi estaba ingresado en el hospital de Milán desde hace varios días. Ya había pasado por el hospital el pasado mes de abril por problemas pulmonares y cardiovasculares, en esa ocasión en la unidad de cuidados intensivo del hospital San Raffaele de Milán.
El funeral del exprimer ministro será este miércoles en la catedral de Milán (norte), tras una capilla ardiente de dos días en su mansión y en la sede de su televisión, Mediaset. El funeral tendrá lugar en el "Duomo" o catedral, aunque por el momento no ha trascendido el horario, según ha confirmado la diócesis milanesa a los medios.
A pesar de su edad, las fuerzas de Berlusconi no habían flaqueado y seguía activo en la política. Lo habíamos visto tan solo unos meses antes para las elecciones generales que ganó Giorgia Meloni, en septiembre de 2022: Silvio Berlusconi aparecía, ya con 85 años, en la Piazza del Popolo de Roma, sostenido por Meloni, entonces candidata al Gobierno de Italia, y Matteo Salvini, también candidato y tercera pata de la coalición ultraderechista.
Tres días después, este bloque ganó las elecciones en Italia. Berlusconi entró como senador el 13 de octubre de 2022, sellando así su regreso a las instituciones desde su inhabilitación, en 2013, por su condena por prostitución de menores y abuso de la autoridad, una condena por la que fue absuelto solo un año después.
Primer ministro en tres ocasiones, tuvo récord de permanencia en el cargo en siete décadas. Sin embargo, más que por su legado político, será recordado por los escándalos que ha protagonizado y por sus declaraciones machistas y polémicas. También por su poder mediático, pues ha sido propietario de varias cadenas de televisión y cabeceras de periódicos.
En 2007 anunció la disolución de su histórico partido Forza Italia y el nacimiento de la coalición El Pueblo de la Libertad, pero en 2013 volvió a refundar Forza Italia y lo ha presidido desde entonces.
En el vídeo bajo estas líneas repasamos su carrera política en imágenes.
De escándalo en escándalo
Además del caso 'Ruby', por el que fue condenado -y luego absuelto-, unas fotos publicadas por el diario El País en 2009 causaron un auténtico tsunami. Las fotos mostraban las orgías que montaba en Villa Certosa, su mansión de Cerdeña. En esa época estaba al frente del país y, aunque no le costó el puesto, sí precipitó el divorcio con su segunda mujer, Verónica Lario.
Ella fue la que le acompañó en mucho de sus encuentros con Vladimir Putin. Berlusconi fue el único líder mundial que visitó Crimea cuando Rusia se la anexionóilegalmente. Pero es que Berlusconi, hasta sus últimos días, presumió de la gran amistad que les unía: "Soy uno de sus mejores amigos", dijo en una ocasión. En plena guerra de Ucrania, el italiano llegó a jactarse de haber recibido regalos del presidente ruso por su cumpleaños.
Una amistad cuestionada.... pero no la única, porque, según Berlusconi, entre sus íntimos estaba también el dictador libio Muadar Gadafi.
Silvio Berlusconi fue también presidente del Milán y de un grupo mediático, lo que hizo que, durante sus años al frente del país, dominara casi todos los medios de comunicación italianos, los mismos que usaba a su antojo. Pero si algo no le faltaba a Berlusconi era amor propio, una inmedible autoestima y un polémico sentido del humor. Hicieran gracia o no sus chistes, de los que dejamos alguna muestra en el vídeo.