Miles de personas han salido a la calle en República Checa para exigir la dimisión del primer ministro en funciones del país, Andrej Babis, que se enfrenta a cargos por presunto fraude y ha perdido el apoyo parlamentario.

Casi seis meses después de que el partido del dirigente Acción de Ciudadanos Descontentos ganara las elecciones con un amplio margen, el empresario continúa sin una perspectiva clara de investidura dado el fracaso de las conversaciones mantenidas con los socialdemócratas.

La mayoría de los partidos han rechazado a Babis debido a las acusaciones de fraude en relación con una serie de subsidios de dos millones de euros de la Unión Europea. Sin embargo, el primer ministro en funciones continúa negando cualquier tipo de comportamiento ilícito.

Los manifestantes se han reunido en la plaza Wenceslas de Praga, la capital del país, según la agencia de noticias CTK. Otras 2.000 se habrían congregado en Brno, la segunda ciudad más grande de República Checa. Las fuerzas de seguridad han indicado que se también se han registrado manifestaciones en otros puntos del país.

Los organizadores de la manifestación han denunciado que alguien que se enfrenta a cargos por corrupción no debería encontrarse al frente del Gobierno.