Un niño apenas puede respirar, necesita una máscara de oxígeno. El humo tóxico ha cubierto toda la región y un millar de personas han sido ingresadas de urgencia por problemas respiratorios. Hay al menos dos personas muertas.

El alcalde de la comarca de Al Qayara, al sur de la urbe, Saleh al Yaburi, ha informado de que el incendio en la fábrica y el almacén ha causado la emisión de "gases venenosos" y ha provocado "asfixia a los habitantes de las zonas cercanas".

Asimismo, Al Yaburi ha señalado que Al Qayara "está totalmente contaminada" después de que los extremistas quemaran yacimientos petroleros antes y después de la liberación de la comarca por parte de las fuerzas iraquíes, el pasado 25 de agosto.

En cuanto a los habitantes de la zona, el director del sector sanitario en la comarca de Al Qayara, Jairi Awad al Jafaye, ha advertido de una posible "catástrofe humanitaria" y de que si los incendios continúan, los casos de asfixia podrían aumentar en las próximas horas.