Las autoridades de Tailandia han informado de que al menos una veintena de personas, la mayoría de ellas niños, han muerto tras incendiarse el autobús escolar en el que viajaban en una autopista de la provincia de Uthai Thani, situada al noroeste de Bangkok, la capital del país.
El incidente ha tenido lugar cuando el vehículo transitaba por la carrera de Vibhavadi Rangsit cubriendo la distancia entre el parque de Ayutthaya y un centro de la Autoridad de Energía Eléctrica en la provincia de Nonthaburi. Según las primeras informaciones de los servicios de emergencias, la mayoría de los fallecidos son alumnos, a excepción de tres profesores.
Asimismo, han informado de que se estima que 16 menores, todos ellos de edades comprendidas entre los tres y los nueve años, y otros tres profesores sí lograron escapar del vehículo en llamas, según ha recogido la cadena de radiodifusión pública Thai PBS.
Los alumnos tenían previsto volver de la excursión sobre las 20:00 (hora local). El ministro del Interior, Anutin Charnvirakul, se ha trasladado hasta el lugar del incidente junto al ministro de Transporte del país, Suriya Juangroongruangkit, donde se ha abierto una investigación.
Anutin ha explicado que el incendio se ha producido poco después de las 12:00 horas de la mañana y ha indicado que aquellos que han logrado salir con vida del autobús han sido trasladados a un hospital de la zona, donde están siendo sometidos a exámenes médicos. Las autoridades calculan que en total había 44 personas a bordo.
Detienen al conductor del autobús
La Policía de Tailandia ha detenido y acusado de cuatro delitos al conductor del autobús escolar. Entre los delitos que afronta el arrestado, quien tras darse a la fuga se entregó a las autoridades, se encuentran el de conducción imprudente con resultado mortal y abandonar el lugar del accidente sin brindar ayuda, recoge el canal público Thai PBS.
Durante el interrogatorio policial, el conductor, identificado con el nombre de Samar, ha declarado que conducía a una velocidad de entre 70 u 80 kilómetros por hora cuando perdió el control del autobús al pasar por un bache, que a su vez provocó que se reventara una rueda y ocasionó un choque lateral que precedió al incendio.
Al ver las llamas, el tailandés trató de pedir ayuda y cogió un extintor de otro vehículo, pero al verse superado por el accidente decidió emprender la huida, según ha asegurado a las autoridades.
Finalmente, el conductor se entregó en la noche del martes en una comisaría de la provincia de Ang Thong, a unos 100 kilómetros al noroeste de Bangkok, tras esconderse en casa de unos familiares.
La Policía ha señalado que la investigación sobre el accidente continúa abierta y puede mantener retenido al arrestado durante 48 horas antes de llevarlo frente a un tribunal, ha informado Thai PBS.
Entre las cuestiones que quedan por resolver es averiguar por qué 19 de los pasajeros del autobús lograron escapar y otros no, ante sospechas de que la puerta pudo haber quedado bloqueada tras el incendio, y si influyó que el vehículo, de dos plantas, usara gas natural como combustible, ha explicado durante una rueda de prensa el director general de la Policía, Kitrat Phanphet.
Entre los supervivientes hay 16 colegiales y tres profesores, algunos de los cuales son tratados de graves quemaduras en hospitales de la capital.
El vehículo había partido ese mismo día desde la escuela Wat Khao Phraya (en la provincia de Uthai Thani) para una excursión a las afueras de Bangkok, a más de 200 kilómetros.
Según documentos oficiales, el colegio acoge a niños desde la guardería hasta los 15 años, sin que hayan trascendido todavía las edades e identidades de los pasajeros.