Más de la mitad de las mujeres en el Reino Unido, un 52%, han afirmado haber sido víctimas de "acoso sexual" en el trabajo y la mayoría de ellas han admitido que no denunciaron los hechos, según un estudio elaborado por la confederación sindical TUC.

En el estudio participaron 1.500 mujeres. Un tercio de las encuestadas han reconocido haber sido sometidas a bromas desafortunadas en su entorno laboral, mientras que una de cada cuatro ha sido objeto de comentarios de tipo sexual relacionados con su cuerpo o su ropa. También se ha desprendido que una de cada cuatro mujeres ha sufrido "tocamientos" no deseados y que una de cada ocho ha afirmado que alguien de su entorno laboral ha tratado de besarla.

A la vista de estos datos, el informe ha determinado que el nivel de acoso sexual en los lugares de trabajo es "vergonzoso" y que las mujeres son víctimas de comentarios sexuales e incluso de exigencias de favores sexuales.

El TUC ha indicado que el problema se agrava en el caso de las mujeres más jóvenes, al haber encontrado que casi dos tercios de las chicas de entre 18 y 24 años han afirmado haber sufrido acoso en sus entornos laborales. En la mayor parte de esos casos, el agresor era un hombre, y casi una de cada cinco participantes en el estudio ha afirmado que el autor del acoso era un jefe o alguien con autoridad directa.

En el informe se señala que cuatro de cinco mujeres que han afirmado haber sido víctimas de acoso sexual en el trabajo no lo ha comunicado por temor a que pudiera afectar a sus relaciones laborales, dañar sus proyectos de trabajo en el futuro o por sentirse demasiado avergonzadas.

"El acoso sexual es humillante y puede tener un enorme efecto en la salud mental. Las víctimas frecuentemente se quedan sintiéndose avergonzadas y atemorizadas y (esta práctica) no tiene cabida en los entornos laborales modernos, ni en la sociedad en su conjunto", ha apuntado la secretaria general del TUC, Frances O'Grady. Según O'Grady, "los empleadores deben ser claros a la hora de defender una actitud de tolerancia cero ante el acoso sexual y abordar seriamente cualquier queja".