Clinton ya contaba con la movilización anticipada de su electorado, ya que, sociológicamente, los demócratas son más previsores. Hace un mes, el actual presidente de EEUU, Barack Obama, ya emitió su voto. Es una imagen que contrasta con lo que se ve en España.

En EEUU, la ley permite votar semanas antes de las elecciones, desde finales de septiembre. Sin embargo, no todos los estados lo permiten. Es el caso de Nueva York, donde los ciudadanos deben acreditar que el día de las elecciones no van a estar dentro del país para emitir su voto.

Es en el voto anticipado donde la candidata demócrata está recibiendo una alegría en la recta final. De los 36 millones de personas que ya han votado, se calcula que la mayoría habría votado por Clinton.

Los demócratas no se confían y la movilización es máxima. De hecho, autobuses de voluntarios del partido se dirigen al estado de Pensilvania, donde 20 votos que son decisivos están en juego.