Mariúpol continúa siendo la ciudad más afectada por los ataques rusos. La última novedad que llega desde allí es el bombardeo efectuado sobre una escuela de arte que estaba siendo utilizada de refugio por más de 400 personas, las cuales se teme que estén bajo los escombros.

"Se sabe que el edificio ha sido destruido y los civiles todavía están bajo los escombros. Se está especificando información sobre el número de víctimas", asegura el Ayuntamiento de la ciudad a través de un mensaje en su cuenta de Telegram. Este ataque se suma al efectuado sobre el Teatro Dramático, donde había más de 1.300 civiles refugiados. De ellos, apenas se ha conseguido rescatar a 130 personas hasta el momento.

Tal es la situación que desde el Ayuntamiento afirman que las tropas rusas están llevándose a sus ciudadanos a Rusia, siendo deportados contra su voluntad. Añaden que las tropas de Putin se han refugiado en un club deportivo donde más de 1.000 ucranianos se escondían de los bombardeos, situación que han podido "utilizar" para "secuestrar" a "varios miles de residentes" de la ciudad.

Mientras tanto, el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, ha decidido suspender la actividad de diez partidos de la oposición con vínculos con el régimen de Vladimir Putin. "Quiero recordar a todos los políticos de cualquier campo: la guerra muestra muy bien la escasez de ambiciones personales de aquellos que intentan poner sus propias ambiciones, su propio partido o carrera por encima de los intereses del Estado, los intereses del pueblo", ha recordado el líder ucraniano. Esta suspensión se mantendrá vigente mientras dure la ley marcial.

Ha sido uno de los anuncios de un Zelenski que ha hecho un nuevo llamamiento a la población rusa, asegurando que las líneas de defensa de la resistencia ucraniana están "llenas de cadáveres de soldados rusos" que "no están siendo recuperados por nadie". Para el presidente ucraniano, el asedio ruso a Mariúpol será considerado "un acto de terror" que se recordará "durante siglos".

La Fiscalía de Ucrania, por su parte, denuncia el fallecimiento de 115 niños durante la guerra, con más de 140 heridos por los ataques rusos. Otra cifra que trasladan las autoridades ucranianas es la de las víctimas civiles en Járkov, que ascienden a más de 260 desde el 24 de febrero.

Las últimas posturas internacionales en posicionarse en este conflicto han sido India y Japón, que han pedido el "cese inmediato de la violencia". Así, Narendra Modi y Fumio Kishida se han comprometido a adoptar medidas para ayudar a afrontar la crisis humanitaria que atraviesa Ucrania. Australia, por su parte, ha prohibido con efecto inmediato la exportación a Rusia de minerales de aluminio, comprometiéndose además a mandar más material militar y asistencia humanitaria a los ucranianos.