La policía de Malasia busca cuatro norcoreanos sospechosos el asesinato del hermanastro de Kim Jong-un. Tras las últimas detenciones los agentes siguen una nueva pista. "Hemos identificado a cuatro sospechosos que podrían ayudarnos en la investigación y puedo confirmar que salieron de nuestro país el mismo día en que ocurrió el incidente" afirma Noor Rashid Ibrahim, el Inspector General de Policía Kuala Lumpur

El día del asesinato Kim Jong-nam esperaba en el vestíbulo del aeropuerto de Kuala Lumpur para viajar a su casa en Macao. Fue entonces cuando dos mujeres se le acercaron y le rociaron la cara con un spray. Supuestamente había químicos en el líquido y Kim Jong-nam murió en una ambulancia camino del hospital.

Kim Jong-nam nació de una relación extramatrimonial del anterior líder norcoreano Kim Jong-il con una actriz de Corea del Sur. Él propio asesinado lo contó en un libro publicado en 2012: "Mi padre mantenía en secreto que vivía con mi madre, que estaba casada, así que no me dejaba salir de casa".

Era el primogénito y parecía destinado a gobernar pero al final terminó exiliado y vivía protegido por escoltas. En Corea del Sur, tenían claro que tras su muerte puede estar su propia familia: "Teniendo en cuenta que los sospechosos tienen nacionalidad norcoreana, estamos sospechando que el gobierno de Corea del Norte está detrás de este caso", sospecha Jeong Joon-Hee, Ministerio de unificación de Corea del Sur.

Para resolver todo el misterio habrá que esperar porque la policía de Malasia exigía a la familia del fallecido que se presentase en Kuala Lumpur. Le dan dos semanas de límite para colaborar con la investigación.