El expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, entre rejas, ha sido oficializado como candidato del Partido de los Trabajadores, lo que intensifica la incertidumbre política en Brasil, mientras que los socialdemócratas proclamaron aspirante al antiguo gobernador de Sao Paulo Geraldo Alckmin.

Al grito de "Lula libre", el Partido de los Trabajadores (PT), la mayor formación de izquierda del país y de toda América Latina, siguió adelante, ahora de forma oficial, con la candidatura de su máximo líder, a pesar de que probablemente será inhabilitado políticamente tras haber sido condenado en segunda instancia a 12 años y un mes de prisión por corrupción pasiva y lavado de dinero.