"El líder de Daesh para el norte de Afganistán, Mawlawi Habib-ul-Rahman, su lugarteniente Mufti Nyamatullah y 152 combatientes se rindieron a las Fuerzas Armadas afganas en la provincia de Jawzjan", ha indicado en un comunicado el Cuerpo 209 del Ejército, responsable de las operaciones en el norte del país.

El portavoz del Cuerpo, Hanif Rezaee, ha detallado que la rendición en masa ocurrió el martes por la noche en el distrito de Darzab, en la provincia que es considerada como el principal bastión de Daesh en el norte de Afganistán. Los combatientes entregaron todas sus armas, municiones, equipamiento y vehículos a las fuerzas de seguridad, ha añadido.

Además, unos 120 miembros están en contacto con el Ejército afgano y desean rendirse, dijo el portavoz. "Con la rendición de los líderes del EI y este número de combatientes, su presencia se reducirá prácticamente a cero y el grupo será completamente eliminado en el norte de Afganistán", ha anunciado Rezaee.

El grupo insurgente se encontraba debilitado después de días de combates con los talibanes, en los que unos 300 combatientes de ambos bandos murieron y más de 500 resultaron heridos, incluyendo altos mandos. Un portavoz del Ministerio de Defensa, Rasoul Muhammad Safi, ha asegurado que es "la primera vez en el país en que un número tan elevado de combatientes de Daesh se entregan al Gobierno de una sola vez".

El portavoz de los talibanes, Zabihullah Mujahid, ha afirmado en un comunicado difundido por correo electrónico que la entrega de armas de los combatientes del Estado Islámico se ha debido a la operación lanzada por su formación insurgente.

El grupo terorrista, que irrumpió en Afganistán en 2015 y creó su bastión en la provincia oriental de Nangarhar, mantiene una enemistad con los talibanes, con los que se ha enzarzado en enfrentamientos que se han saldado con centenares de muertos en ambos bandos en el país.