No solo Julian Assange fue espiado; también su abogado, Baltasar Garzón. laSexta ha accedido a las fotografías que lo demuestran. En esa serie de instantáneas, que hoy se ven por primera vez, se observa al exmagistrado esperando en el Aeropuerto de Barajas durante varios minutos hasta que sale quien fue a buscar.
Se trata del expresidente ecuatoriano Rafael Correa, quien también fue espiado. Él gestionó el asilo a Julian Assange en su embajada de Londres y llegaba a Madrid, donde se iba a reunir con Garzón, coordinador de la defensa de Assange. Los espías les siguieron todo el trayecto hasta la casa del exmagistrado e informaron incluso de las conversaciones que tuvieron: "(...) Trataron temas relativos a la situación política de Ecuador, conocidos en común de ambos, la situación que se vive en Cataluña (...)".
Esas conversaciones están descritas en un informe que les
hicieron. También redactaron uno sobre Correa, quien fue espiado en su domicilio.
Robaron incluso los identificadores de su ordenador y tablet. Tomaron notas e
informaron, también, de sus relaciones y conversaciones privadas: "(...) Habla
sobre (...) su intención de volver a Ecuador".
El informe también refleja con quién se iba a reunir: una
periodista del medio 'Rusia Today' y también con el secretario general de
Podemos, Pablo Iglesias. De él elaboraron una biografía completa que la empresa 'española' redactó en inglés.
Correa y sobre todo Garzón eran objetivos especiales y así
lo reflejaba la empresa de seguridad, la que espiaba en sus mails. Sus
reuniones con Assange eran escrutadas y se hacían informes tras estar con
periodistas o y otros en los que se llega a transcribir una conversación entre el
cliente Assange y el abogado Garzón. Una defensa que le puso a él también en el
objetivo de los espías.