La ‘milla de la fiesta’
en Berlín, junto a la puerta de Brandeburgo, es el punto donde la Policía
alemana ha reforzado más la seguridad. Ya se han colocado grandes bloques de hormigón
para cerrar el acceso al recinto y evitar ataques como el del camión que mató a
12 personas en un mercado navideño. "La Policía va a trabajar en
estrecha colaboración con todas las instituciones para prevenir cualquier
ataque terrorista", explica Thomas Neuendorf, portavoz de la Policía Local
de Berlín.
1.800 agentes, más otros
800 miembros de seguridad privada, equipados con metralletas, estarán presentes
durante las celebraciones para evitar ataques de terrorismo islamista que,
según Angela Merkel, ha sido la prueba más difícil para el país este año: "Es
especialmente amargo y despreciable si los ataques terroristas son perpetrados
por personas que buscan protección en nuestro país".
En Colonia, 1.500
agentes controlarán la zona de la catedral y la estación. Quieren evitar que se
repita la situación del año pasado cuando más de un centenar de mujeres fueron
acosadas.
96.000 policías
garantizarán la seguridad en Francia. Solo en París el dispositivo cuenta con
10.300 agentes. "Hemos redistribuido las fuerzas que tenemos destinadas
en los colegios a estaciones de tren, aeropuertos y otros puntos turísticos",
señala el ministro de Interior francés.