Después de considerar a una niña negra de 13 años sospechosa de robo, dos policías blancos la detienen brutalmente. A pesar de los desgarradores gritos de la menor, los agentes llegan incluso a ponerle la rodilla en la cabeza.

La familia de la niña, que denuncia lo ocurrido, ha explicado que los agentes sabían que la menor sufre enfermedades mentales. Las autoridades de Minnesota han abierto una investigación.

Este impactante caso, por desgracia no se trata de algo aislado. La muerte de Eric Garner se convirtió hace ya cinco años en un símbolo de la brutalidad policial contra los afroamericanos en EEUU.

Después de ser detenido en una movilización por los afroamericanos, Eric Garner murió asfixiado y estrangulado por un policía. Él repitió hasta en 11 ocasiones que no podía respirar, pero no le sirvió de nada.

El Gobierno de Donald Trump decidió no presentar cargos contra el policía responsable, que continuó trabajando en su puesto durante meses.