Nuevo caso de brutalidad policial en Estados Unidos. Dos agentes de la Policía de Los Ángeles han asesinado a un hombre negro que circulaba en bicicleta efectuando hasta 20 tiros por la espalda.

La víctima, Dijon Kizzee, de 29 años, iba en bicicleta cuando los agentes quisieron detenerle por presuntamente haber cometido una infracción de tráfico (aunque no han especificado de qué tipo).

Según el relato de la Policía, cuando quisieron detenerle el hombre golpeó a uno de ellos en la cara. Además, aseguran que en su huida el hombre dejo caer algunas prendas de ropa entre las que había envuelto un arma. "Los agentes notaron que dentro de la pila de ropa había una pistola semiautomática negra", ha explicado a la prensa el teniente Brandon Dean, de la oficina del sheriff del condado de Los Ángeles.

En ese momento, los agentes dispararon más de 20 tiros por la espalda a Kizzee. La víctima falleció en el acto.

El teniente Dean ha asegurado que se ha abierto una investigación para esclarecer los hechos, pero las protestas contra la brutalidad policial no se han hecho esperar en las calles del barrio en el que residía Kizze.

Más de un centenar de personas, amigos y familiares de la víctima se han concentrado durante varias jornadas en el lugar del asesinato para insistir una vez más en el mensaje que ha calado a nivel mundial: 'Black Lives Matter', las vidas de los negros importan.

Por su parte, Ben Crump, el abogado de derechos civiles que representa a la familia de Kizze ha pedido la colaboración de los testigos para recabar información sobre lo ocurrido. En su cuenta de Twitter además ha expuesto que los agentes le dieron el alto por "violación del código de vehículos". "Dicen que corrió y se le cayeron la ropa y la pistola. No la recogió, pero los policías le dispararon por la espalda más de 20 veces y luego lo dejaron durante horas".