Banderas de Cuba se mezclaban con banderas del arcoíris y las consignas que los manifestantes gritaban eran "sí se puede", "Cuba diversa" o "lo más grande, Cuba". La marcha por los derechos LGTBI era una manifestación no autorizada.

Protestaban con motivo de la suspensión de la marcha oficial, también llamada 'conga' contra la homofobia que se realiza en la isla desde hace más de una década y que organiza que organiza el Centro Nacional de Educación Sexual, dirigido por Mariela Castro, hija de Raúl Castro.

La marcha se desarrolló de forma pacífica y sin incidentes frente a una gran presencia policial hasta que, al dirigirse hacia el Malecón, los agentes de seguridad interceptaron a los manifestantes.

Fue entonces cuando comenzaron los enfrentamientos que se saldaron con al menos cuatro detenidos, según el recuento de los organizadores.