El presidente en funciones del Gobierno español, el socialista Pedro Sánchez, abrió este viernes la puerta a que la presidencia de la Comisión Europea (CE) durante los próximos cinco años recaiga en un político del Partido Popular Europeo (PEE). Sánchez, que también ejerce de negociador de la familia socialdemócrata europea, había defendido siempre que el holandés Frans Timmermans, actual vicepresidente primero de la Comisión, tomara el relevo de Jean-Claude Juncker al frente del Ejecutivo comunitario.

"No renunciamos a la presidencia de la Comisión. Nos habría encantado que fuera Frans Timmermans pero si finalmente no es el caso, pues es evidente que sí puede haber un presidente de la Comisión del Partido Popular Europeo", dijo Sánchez, a propósito del puesto ejecutivo más relevante de la UE. El jefe del Gobierno español confirmó que en la negociación del jueves en el Consejo los Estados miembros se descartaron los cabezas de lista de las tres principales familias políticas en las elecciones europeas, es decir, el alemán Manfred Weber por parte del PPE, el holandés Frans Timmermans por parte de los socialdemócratas; y la danesa Margrethe Vestager como aspirante liberal.

Sánchez comentó que lo que ahora deben hacer esos grupos políticos es "diseñar ese método" para elegir tanto a la persona que ejerza la presidencia de la CE, como las del Consejo y el Parlamento europeos, así como al jefe de la diplomacia europea y del Banco Central Europeo (BCE). Todos esos puestos, salvo el del presidente del Consejo Europeo, la institución que representa a los Estados miembros de la UE, deben ser aprobados por mayoría absoluta el Parlamento Europeo. Para volver a buscar el acuerdo los líderes de la Unión volverán a reunirse en Bruselas el próximo 30 de junio, dos días antes de que se constituya la Cámara.

"Es más complicado que hace cinco años porque somos más familias las que tenemos que ponernos de acuerdo", añadió el presidente del Gobierno español, quien señaló que en el reparto será indispensable "que haya una representación de las tres principales familias" políticas. Sánchez agregó que tras la constatación de que Weber, Timmermans y Vestager no siguen en liza "hay que volver a empezar" y buscar "gente de mucho perfil político, capacitación técnica y experiencia" con capacidad para "sacar adelante los principales retos de la Unión Europea (UE)".

"Más allá de la urgencia del tiempo, que sin duda alguna la tenemos, es evidente que hay una confianza (...) en que al final llegaremos a buen puerto", dijo Sánchez, quien señaló que "los primeros ministros más experimentados" le han trasladado que "que esto acaba de empezar".

La "urgencia" evocada por el mandatario español se refiere a la fecha límite del 2 de julio en que se constituirá el nuevo Parlamento Europeo y que, caso de no tener un candidato propuesto por el Consejo (los países de la UE) para presidir la institución, se dotará de uno de manera autónoma. "Lamento mucho que Frans Timmermans no haya podido ser la persona elegida ayer" por que tiene "cualidades y experiencia" pero "la política es así y así hay que vivirla", concluyó Sánchez, quien subrayó que tiene el "objetivo marcado" de que "la socialdemocracia esté representada suficientemente visible en las instituciones".