Tras más de cuatro horas de reuniones en el hotel Capella de la isla de Sentosa, Kim y Trump protagonizaron una ceremonia para firmar el documento conjunto, que será hecho público en breve y que supuso el final de la cumbre. "Hoy hemos mantenido una reunión histórica, y estamos listos para dejar atrás el pasado. El mundo va a presenciar un gran cambio", dijo Kim durante la firma, en la que también quiso mostrar su "agradecimiento" a Trump por su disposición a celebrar la reunión.

Por su parte, Trump expresó que el documento recién firmado era "muy detallado" y aseguró que estaba desarrollando "un vínculo muy especial" con Kim. "Vamos a ocuparnos de un problema muy grande y muy peligroso para el mundo", recalcó Trump.

Corea del Norte se ha comprometido a trabajar en su completa desnuclearización, según recoge el acuerdo. El texto, que todavía no se ha hecho público oficialmente pero del que se ha distribuido una fotografía captada tras la firma, señala que Corea del Norte "se compromete a trabajar en la desnuclearización completa de la península coreana".

El documento también establece que el secretario de Estado de EEUU, Mike Pompeo, se reunirá en "la fecha más temprana posible" con un alto funcionario norcoreano para continuar el diálogo bilateral sobre la desnuclearización.

En declaraciones a periodistas al separarse de Kim, Trump describió al líder norcoreano como un hombre "con mucho talento" que "ama mucho a su país", y añadió que ambos se reunirán "muchas veces" a partir de ahora. Preguntado por si invitaría a Kim a la Casa Blanca, el mandatario respondió: "Absolutamente, lo haré".

La cumbre de Singapur, cuyo objetivo es tratar la posible desnuclearización de Pyongyang, es la primera entre mandatarios de ambos países tras casi 70 años de confrontación a raíz de la Guerra Corea (1950-1953), y 25 de negociaciones fallidas y tensiones a cuenta del programa atómico norcoreano.