El presidente del Gobierno italiano, Matteo Renzi, ha anunciado un decreto legislativo con el que se podrá despedir "en tan sólo 48 horas" a los funcionarios públicos que cometan absentismo injustificado.
"A quien se le pilla que ficha, pero después no entra a trabajar será despedido en 48 horas. Es un hecho de sentido común y de ser correctos porque permitirá ver con mejores ojos al resto de los empleados de la administración pública", afirmó Renzi durante una intervención en Caserta.
Renzi había anunciado en un entrevista televisiva que la medida sería aprobada durante el Consejo de Ministros y en la que también se incluirá el despido para el dirigente público que no proceda al despido del funcionario absentista.
El decreto llega después de algunos casos de funcionarios pillados mientras fichaban y después se marchaban a casa o empleados que fichaban las tarjetas de otros compañeros tanto en Roma como en la localidad de Sanremo, donde hace unos meses se arrestaron a una treintena de trabajadores del municipio bajo esta acusación.
Renzi explicó que, de esta manera, se acelerarán los tiempos de despido para estos casos de "fraude" ya que actualmente para despedir a un funcionario absentista se necesita una media de 102 días.
La medida ha sido recogida con tibieza por parte de los sindicatos italianos, quienes, aunque no oponiéndose al que empiezan a llamar "despido exprés", han pedido a Renzi que afronte otros temas más importantes como la renovación del convenio de funcionarios públicos congelados desde hace seis años.
"Los primeros y más inflexibles en denunciar estos casos somos nosotros, pero querríamos que el primer ministro Renzi se dedicase con la misma diligencia a la renovación del convenios público", ha explicado Rossana Dettori, una de la responsanbles de la Confederación General Italiana del Trabajo.