El Ejército de Israel publicó este viernes un mapa que divide la Franja de Gaza en cientos de sectores, con el objetivo de ordenar evacuaciones puntuales de civiles en el marco de la reanudación de su ofensiva por aire, tierra y mar sobre el enclave palestino. "En preparación para la siguiente etapa de la guerra, las Fuerzas de Defensa de Israel publican el mapa que divide el territorio de la Franja de Gaza en áreas reconocibles, para permitir a los residentes orientarse, comprender las instrucciones, y evacuar de lugares específicos por su seguridad si es necesario", indicó un vocero del Ejército israelí.

El vocero solicitó a los gazatíes que "ubiquen el área correspondiente y actúen si se les solicita que evacuen de ella". Israel y Hamás reanudaron este viernes el fuego cruzado tras siete días de tregua que permitieron la liberación de 105 rehenes en Gaza y 240 palestinos que estaban presos en Israel, además de la entrada de ayuda humanitaria a Gaza. Estados Unidos, principal socio de Israel, pidió al Estado judío abstenerse de reanudar la ofensiva militar en Gaza a menos de que establezca un plan concreto para proteger civiles, que incluya "la designación precisa de áreas en el centro y sur de Gaza donde los civiles pueden estar a salvo y fuera de la línea de fuego".

Estados Unidos no quiere que se repita en el sur del enclave palestino "las pérdidas masivas de vidas civiles y el desplazamiento (de personas), a la escala en que ocurrió en el norte", dijo el jueves el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, en Tel Aviv. Desde que se inició la guerra entre Israel y Hamás, el 7 de octubre, las fuerzas israelíes han bombardeado estructuras civiles de la Franja, como zonas residenciales, hospitales, escuelas, mercados y mezquitas, argumentando que el grupo islamista ha construido sus cuarteles e infraestructuras militares ahí. En varias ocasiones, Israel ha ordenado la evacuación de civiles a través de las redes sociales, llamadas telefónicas o el lanzamiento de millones de esquelas, pero sus ataques se han producido incluso en las zonas que marcó como "seguras".

Se estima que casi dos millones de gazatíes -de los 2,4 millones que conforman la población total- han sufrido desplazamiento forzado y que viven una grave crisis humanitaria ante el colapso de los hospitales y la escasez de vivienda, agua potable, alimento, medicinas y electricidad. La guerra estalló tras un ataque de Hamás que incluyó el lanzamiento de miles de cohetes hacia Israel y la infiltración de unos 3.000 milicianos que masacraron a unas 1.200 personas y secuestraron a otras 240 en aldeas israelíes cercanas a la Franja.

Desde entonces las fueras de Israel mantuvieron una implacable ofensiva por aire, tierra y mar sobre el enclave palestino que ha dejado más de 15.000 muertos, otras miles de personas sepultadas bajos los escombros