Israel bombardeó puestos militares del movimiento islamista Hamás en Gaza en respuesta al disparo horas antes de dos cohetes contra su territorio, lo que supuso una nueva violación del frágil alto el fuego que este jueves puso fin a una dura escalada de la violencia con la Yihad Islámica.

El Ejército israelí atacó varios objetivos de Hamás tras el lanzamiento de dos proyectiles que hicieron sonar en plena noche las sirenas en la urbe israelí de Bersheva, y que fueron interceptados por el sistema de defensa Cúpula de Hierro.

Entre los puntos atacados hubo un "campo de entrenamiento" del grupo, "un complejo militar utilizado por su fuerza naval" y "una infraestructura subterránea", dijo un comunicado militar.

Según confirmó una portavoz castrense, ésta fue la primera ocasión en los últimos días en que Israel bombardeó instalaciones de Hamás. El grupo islamista, que gobierna de facto la franja desde que tomó su control en 2007, tuvo un papel secundario en el último repunte de tensión de esta semana, donde no fue objeto de los bombardeos israelíes de represalia.

Estos se centraron en la Yihad Islámica, lo que marcó un cambio de posición por parte de Israel respecto a Hamás, a quien considera responsable de todo incidente procedente del enclave, y al que usualmente ataca en respuesta a agresiones contra su territorio. La escalada de los últimos días estalló la madrugada del martes, tras un ataque selectivo israelí que mató en pleno Gaza al líder del brazo armado de la Yihad Islámica, Bahaa Abu al Ata, y a su mujer.

Esta organización, segunda en número de milicianos en el enclave después de Hamás, comenzó entonces el lanzamiento masivo de más de 460 proyectiles, ante lo que Israel respondió con bombardeos contra sus instalaciones militares. Estas más de 48 horas de violencia se saldaron con 35 muertos palestinos, entre ellos 19 milicianos.

El resto eran civiles, entre ellos tres mujeres y ocho menores (incluido uno de 18 que en Gaza no tiene mayoría de edad). El jueves de madrugada, la calma tensa volvió a la zona con la entrada en vigor de una tregua mediada por Egipto y Naciones Unidas. Hasta ahora, el cese de hostilidades ha aguantado, aunque ha sido violado desde entonces con cuatro ataques con cohetes desde Gaza.