El Centro de la Promoción de la Virtud y Prohibición del Vicio de Irán ha afirmado este lunes "que la misión de la Policía de la moral ha terminado”, pero ha señalado que se estudia el uso de nuevas tecnologías para controlar la vestimenta de las mujeres.
“La misión de las patrullas de la Policía de la Moral ha terminado”, ha declarado el portavoz del Centro de la Promoción de la Virtud y Prohibición del Vicio, Ali Janmohamadí, al diario "Jamaran". Sin embargo, Janmohamadí ha matizado que se están “tomando decisiones acerca de la castidad y el velo, para que, si Dios quiere, se apliquen en un marco más moderno, con el uso de nuevas tecnologías”.
El funcionario ha defendido que hay una gran demanda popular para que se respeten “la castidad y el hiyab”, por lo que “las autoridades policiales y judiciales deben tomar medidas”.
Las autoridades iraníes ya usan tecnologías como cámaras de tráfico para multar a mujeres que conducen sin el obligatorio velo, actos que se pueden penar con hasta dos meses de cárcel.
Irán vive protestas desde la muerte de Mahsa Amini tras ser detenida por la Policía de la Moral por no llevar bien puesto el velo islámico, y desde entonces esa fuerza ha desaparecido de las calles del país. Las revueltas comenzaron por la muerte de la joven kurda de 22 años, pero han evolucionado y ahora los manifestantes piden el fin de la República Islámica fundada por el ayatolá Ruholá Jomeiní en 1979.
En los casi tres meses de protestas han muerto más de 400 personas y al menos 2.000 han sido acusadas de diversos delitos por su participación en las movilizaciones, de las que seis personas han sido condenadas a muerte.
Janmohamadí parecía confirmar así el confuso anuncio del fin de semana acerca del desmantelamiento de la Policía de la Moral, cuerpo que vigila desde 2005 que las mujeres cumplan con el estricto código de vestimenta impuesto por la República Islámica.
El fiscal general del país, Mohamad Yafar Montazerí, afirmó que el polémico cuerpo "no tiene nada que ver con el poder judicial y fue suprimido por los que lo crearon”, lo que se interpretó como el fin de la fuerza.
Sin embargo, medios conservadores negaron después la supresión de la Policía de la Moral, que depende del Ministerio del Interior y del Consejo Supremo Cultural de la Revolución.
El Centro de la Promoción de la Virtud y Prohibición del Vicio de Irán vigila la moral en el país persa, y entre sus miembros se encuentran los ministros de Interior, Inteligencia y Cultura, entre otros.
En su forma actual, la Policía de la Moral existe desde 2005, pero antes tuvo diversas encarnaciones y estuvo gestionada por diversos organismos para aplicar las estrictas normas de vestimenta de la República Islámica. El ayatolá Ruholá Jomeiní impuso la obligatoriedad del velo en 1983, prenda que declaró como “la bandera de la revolución” y sin la cual las mujeres estaban "desnudas".