El estado norteamericano de Iowa ha legalizado el trabajo infantil. Un proyecto de ley que supone un retroceso en los derechos de los menores y que contempla permitir a los jóvenes de 14 años trabajar en turnos nocturnos, a los de 15 emplearse en líneas de montaje y que los de 16 y 17 sirvan alcohol.

La propuesta, que se ha aprobado esta semana, ha sido muy defendida en el parlamento de Iowa por parte de los diputados republicanos y algunos empresarios, como Steve Sarcone, que asegura que "los niños no se van a la cama a las 9 de la noche en verano" y esta es una forma de proporcionarles "un ambiente seguro".

Desde las filas demócratas atacan ferozmente la propuesta. El senador demócrata de Iowa Zach Walls ha criticado con dureza la medida: "Hemos legalizado que jóvenes de 14 y 15 años trabajen con sierras, en excavaciones, en trabajos manuales peligrosos... ¡en demoliciones!".

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, prometió a finales de febrero una campaña contra esta lacra después de que el 'New York Times' demostrase que se ha disparado el número de niños explotados por todo el país, muchos de ellos procedentes de Sudamérica. Sin embargo, el Secretario de Sanidad y Servicios Humanos, el demócrata Xavier Becerra, fue pillado apoyando alguna de estas leyes. En un princiìo, la Casa Blanca le respaldó, pero al día siguiente, a través de un comunicado, le exigieron explicaciones.

El debate sobre la legalización del trabajo infantil no sólo está vivo en Iowa. Diversos estados del país lo plantean e incluso lo han aprobado. Por ejemplo, en Alabama, hace unos meses las autoridades encontraron a niños de 12 años trabajando en una planta de coches y en Wisconsin hallaron a más de 100 menores empaquetando productos en una empresa cárnica.

Según el Instituto de Política Económica, en los últimos dos años, hasta 10 estados han considerado proyectos de ley para flexibilizar las restricciones del trabajo infantil.