La India sufre la peor ola de contagios y muertes que se ha visto en el mundo desde el comienzo de la pandemia. Este jueves, ha superado los 18 millones de casos tras batir un nuevo récord de infecciones, situándose como la cifra más alta registrada en el mundo hasta el momento, tras alcanzar casi los 380.000 contagios, además de contabilizar un nuevo máximo con más de 3.600 muertes en un día.

El país asiático ha notificado 379.257 nuevos contagios en las últimas 24 horas, lo que eleva el total hasta los 18,3 millones, y se mantiene como la segunda nación más afectada por la pandemia solo por detrás de Estados Unidos, según el Ministerio de Salud indio.

Los expertos niegan una posible relación entre la nueva cepa y esta preocupante situación, pues la variante se descubrió en octubre del año pasado. Apuntan, más bien, a la alta densidad de población y las escasas medidas de higiene tras anunciar el inicio de la vacunación masiva a principios de año (desaparecieron las mascarillas y la distancia de seguridad).

Desde el día 14 de abril el número de fallecidos no ha hecho sino aumentar vertiginosamente: aquel día se registraron 1.038 casos y, desde entonces, ha ido aumentando El número de fallecidos acumulados desde esa fecha es de 25.000. Lo mismo ocurre con los contagiados: se ha pasado de 14 millones de positivos a más de 18 en 15 días.

La vacunación tampoco acaba de arrancar en un país puntero en la producción de sueros. Tan solo el 7% de su población total ha recibido una dosis, pero hay que tener en cuenta que el país cuenta con más de 1.400 millones de habitantes.

Qué se sabe de la nueva variante

La variante india del COVID-19 muestra en estudios de laboratorio indicios de ser más contagiosay resistente a algunas vacunas y tratamientos, según advirtió este miércoles la Organización Mundial de la Salud (OMS). Incluye mutaciones "asociadas con un incremento de la transmisión" y con una menor capacidad de neutralizar el virus con algunos tratamientos con anticuerpos monoclonales, destacó la OMS en su informe epidemiológico semanal.

Asimismo, algunos análisis realizados en Estados Unidos muestran una posible reducción de los efectos neutralizadores de las vacunas contra esta variante, e incluso estudios preliminares con la vacuna Novavax-Covaxin muestran que ésta no es capaz de contrarrestarla.

La variante india, detectada primero en pacientes de ese país a finales de 2020, está siendo estudiada mediante más de 1.200 secuenciaciones de su genoma en 17 países, entre ellos la propia India, Reino Unido, EE. UU. y Singapur.

Pese a la preocupación por la incidencia de este virus en la India (que ya concentra casi un 40 % de los nuevos casos globales) la OMS la considera aún sólo una "variante de interés" y no "variante de preocupación", el máximo nivel de alerta (por ahora sólo considerado para las de Reino Unido, Sudáfrica y Brasil).