El ciclón 'Lane', próximo a las islas de Hawái, se degradó a tormenta tropical aunque todavía continúa dejando fuertes lluvias e inundaciones en el archipiélago estadounidense, informaron los servicios meteorológicos nacionales.

No se espera que el centro de la tormenta, situado a unos 240 kilómetros al sur de Honolulu, toque finalmente tierra, aunque podría pasar peligrosamente cerca de las islas centrales, incluyendo Oahu y Maui. Pero es la Isla Grande de Hawái, la más oriental del archipiélago, la que ha sido más duramente castigada por la lluvia, causando graves inundaciones, derrumbes y cierres de carreteras.

"El potencial de lluvias excesivas sigue siendo alto, lo que podría conducir a inundaciones repentinas que amenazan la vida, así como el terreno y aludes de lodo", asegura el Servicio Meteorológico Nacional desde su oficina en Honolulu.

'Lane' continuará presentando numerosos peligros en algunas partes de las islas, incluyendo fuertes vientos, marejadas de hasta 120 centímetros por encima de las mareas normales y de 160 a 800 centímetros cúbicos de lluvia, según los pronósticos.

El Pacífico Central recibe pocos huracanes y tormentas tropicales en comparación con el Atlántico o el Pacífico Oriental, y Hawái es un objetivo pequeño en medio del océano que no suele estar amenazado. Aunque con el paso de las horas los expertos apuntan que cada vez es más improbable, si 'Lane' tocara tierra contaría con una característica excepcional más, ya que solo dos huracanes han tocado tierra en Hawái desde la década de 1950: el huracán Dot en 1959 y el huracán Iniki en 1992.