Los trabajadores de ambulancias de Inglaterra y Gales harán una huelga por motivos salariales, entre la preocupación de los responsables de los hospitales por no poder garantizar la seguridad de los pacientes.

Un día después de que alrededor de 10.000 personas del personal de enfermería del Servicio Nacional de Salud (NHS) de Inglaterra, Gales e Irlanda del Norte fueran a huelga por segunda vez en menos de una semana, el personal de ambulancias se une a las quejas por los salarios y la presión sobre el sistema de salud público.

Según los responsables del NHS, este paro laboral preocupa a los jefes de hospitales pero afirma que, a pesar de todo, los servicios mínimos de urgencia seguirán disponibles, a la vez que piden a los ciudadanos que usen estos servicios con prudencia y solo en caso de urgencia vital.

En Inglaterra, ocho de los diez principales servicios de ambulancias ya han declarado accidentes críticos debido a la presión a la que están sometidos. Además, el tiempo de respuesta es ya el doble que hace dos años, según ha puntualizado la BBC.

Del mismo modo, acontecerán irregularidades debido a la huelga de paramédicos, personal de administración, auxiliares de urgencias y técnicos en el resto del país. Desde el Gobierno insisten también a los ciudadanos a extremar las precauciones y evitar desplazamientos innecesarios en coche o deportes de contacto.

Casi 800 miembros de las fuerzas armadas serán desplegados este miércoles para prestar ayuda, si bien se estima que sus labores serán limitadas, ya que no podrán facilitar asistencia médica.

El Gobierno pide "sentido común"

El ministro británico de Sanidad, Steve Barclay, ha pedido a la población ejercer "sentido común" a la hora de hacer actividades para evitar situaciones de riesgo por la huelga que secundan los trabajadores de ambulancias y paramédicos de emergencia en Inglaterra y Gales.

Esta medida de fuerza se suma a las convocadas este mes por otros sectores en demanda de mejoras laborales para hacer frente al fuerte incremento del coste de la vida en el Reino Unido, donde la inflación se situó en noviembre en el 10,7 %.

"El sistema estará hoy bajo una presión muy fuerte. Le estamos diciendo al público que ejerza su sentido común en cuanto a las actividades que realizan, teniendo en cuenta las presiones que hay sobre el sistema", declaró Barclay a la cadena Sky News.

En esta medida de fuerza, habrá servicios mínimos para atender llamadas de emergencias consideradas de "categoría uno", en las que un paciente tiene un inmediato riesgo de muerte. Las autoridades han pedido a la población que, en caso de asistencia urgente, que primero lo haga a través del servicio de emergencia por internet y evite hacer la llamada telefónica.

El paro de los trabajadores de ambulancias sigue a la medida de fuerza que miles de enfermeros en el Reino Unido secundaron el martes, también en demanda de mejoras laborales.