El Parlamento de Hong Kong ha retirado de manera oficial la propuesta de ley de extradición que originó las protestas masivas que están teniendo lugar en la ciudad asiática desde el pasado 9 de junio.

En una sesión del Consejo Legislativo (la asamblea hongkonesa), el ministro de Seguridad John Lee se ha encargado de hacer pública esta decisión. "Para ilustrar claramente la posición del Gobierno respecto a esta propuesta, anuncio la retirada de esta", ha afirmado.

No obstante, la sesión tuvo que ser suspendida poco después, ya que la bancada prodemocrática ha empezado a gritar consignas a Lee y a pedir su dimisión, lo que ha elevado la tensión en la cámara.

Este anuncio se ha producido ocho meses después de que la propuesta se pusiera sobre la mesa. Una norma que, según opositores, abogados y activistas, habría permitido que Pekín accediera a "fugitivos" refugiados en Hong Kong para llevarlos a su jurisdicción y procesarlos en un sistema carente de garantías.

La desestimación de la propuesta es una de las cinco demandas de los manifestantes prodemocráticos. Estas incluyen también una investigación independiente sobre la brutalidad policial, la amnistía de los arrestados, la retirada del término "revueltas" en relación a las manifestaciones del 12 de junio y el sufragio universal para elegir al jefe del Ejecutivo local.

Carrie Lam, jefa del gobierno de Hong Kong, ya anunció la retirada formal de la propuesta el pasado 4 de septiembre. Sin embargo, las protestas han continuado con el objetivo de lograr que se cumplan todas sus demandas.

Algunos manifestantes han optado por tácticas más radicales que la protesta pacífica. En esta línea, los enfrentamientos violentos con la Policía son habituales.