Nuevo día de declaración para el príncipe Harry en el juicio por su denuncia contra los tabloides británicos, jornada en la que hemos conocido más detalles acerca de sus palabras en la Corte Suprema de Londres, como su relato de lo difícil que fue para él su infancia y adolescencia.

Harry afirma que no tiene dudas de que, al menos, tres periódicos del Grupo Mirror le hackearon el móvil. El príncipe se ha mostrado cansado ante las preguntas sobre su expareja Chelsy Davy, quien le abandonó al no aguantar la presión sensacionalista.

Denuncia que sufrió bullyng en el colegio y que se tenía que esconder en los maleteros de los coches para evitar ser perseguido, dando por hecho que por culpa de la presión mediática hay "gente que ha muerto". Además, lanza un dardo a la prensa preguntándose "cuánto más se mancharán las manos de sangre antes de poner fin a esta locura".

Esta dura acusación hace referencia a la accidentada muerte de Diana en París tras ser perseguida por paparazzis. El duque de Sussex recuerda otro momento traumático durante su adolescencia, cuando numerosos periódicos difundieron un rumor de que su padre biológico era realmente James Hewitt, un ex oficial de caballería del ejército británico con el que la princesa tuvo una relación, eso sí, después de nacer Harry.

Sin embargo, el príncipe asegura que estas declaraciones le hicieron dudar en aquel momento si el actual rey británico era realmente su padre.