El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, vuelve a ser protagonista de la polémica, y esta vez ha puesto el foco en el medio ambiente. Su propuesta: hacer caca un día sí y uno no para preservar los ecosistemas, una 'idea' que ya sido duramente criticada por los colectivos que luchan para salvar al planeta.

Bolsonaro siempre se ha mostrado escéptico ante el cambio climático: comer un poco menos es otra de sus recetas milagrosas ante el desafío de alimentar a una población cada vez más numerosa. En las últimas semanas, además, el mandatario brasileño ha cuestionado también el importante aumento de la deforestación de la selva amazónica.

Lo que todos podemos hacer contra el cambio climático en nuestro día a día