Nuevo pontífice
¡Habemus papam! El cardenal Robert Prevost se convierte en el papa León XIV
Los detalles Robert Prevost se convierte en el sumo pontífice número 267 de la Iglesia católica bajo el nombre de León XIV. Pertenece al ala progresista y en su primer discurso ha pedido fomentar el diálogo y ha reivindicado el legado de Francisco.

El cardenal estadounidense Robert Francis Prevost Martínez se convierte en el sumo pontífice número 267 de la Iglesia católica bajo el nombre de León XIV. Prevost es arzobispo y obispo emérito de Chiclayo (Perú), donde también ejerció las funciones de misionero.
Prevost fue nombrado líder del dicasterio vaticano por Francisco en 2023, convirtiéndose en su principal asesor en la selección de obispos a nivel mundial. También fue nombrado miembro de la Congregación para el Clero en 2019 y de la Congregación para los Obispos en 2020.
Pertenece al ala progresista, supone una apuesta por la continuidad en las reformas iniciadas por el pontífice argentino. Su trayectoria se ha caracterizado por el aperturismo y la defensa de los más desfavorecidos.
Un papa con orígenes españoles
El nuevo papa, León XIV, tiene ascendencia española. Su abuela materna era española, mientras que su abuelo era francés. Por ello, habla español de manera fluida, como ha demostrado en su primer discurso, en el que ha saludado a los fieles de Chiclayo, donde fue obispo. "Mando un saludo a mi diócesis de Chiclayo, Perú, donde un pueblo fiel ha acompañado a su obispo y ha dado tanto para seguir siendo iglesia fiel de Jesucristo", ha dicho el nuevo pontífice desde el balcón central de la basílica de San Pedro.
El primer discurso de León XIV
Unos minutos después de hacerse público su nombramiento por parte del protodiácono Dominique Mamberti, León XIV dado su primer discurso para dirigirse a los fieles, en el que ha recalcado la importancia de construir puentes y fomentar el diálogo y ha reivindicado el legado de Francisco. Este ha sido el primer discurso del nuevo pontífice:
"Hermanos, hermanas, este es el primer saludo del Cristo Resurgido. El pastor que ha dado la vida por Dios. Yo también quiero que este saludo de paz entrase en vuestro corazón, llegase a vuestras familias, a todas las personas allá donde estén. A todos los pueblos y la Tierra. La paz sea con vosotros.
Esta es la paz del cristo resurgido. Una paz perseverante. Proviene de Dios, que nos ama a todos incondicionalmente. Todavía conservamos aquella voz débil y valiente del papa Francisco. El papa que adoraba a Roma y que daba su último saludo el día de Pascua.
Dios os quiere mucho, os ama a todos. El mal no permanecerá. Estamos todos en las manos de Dios. Sin miedo, unidos, mano a mano y entre nosotros. Somos discípulos de Cristo. Cristo nos precede. El mundo necesita su luz. La humanidad necesita de él y de su amor. Ayudaros los unos a los otros a construir puentes con el diálogo para ser un único pueblo que viva siempre en paz. Gracias al papa Francisco.
Quiero dar las gracias a todos los cardenales que me han elegido para ser el sucesor de Pedro y caminar junto a vosotros buscando una Iglesia unida y la paz y trabajando como hombres y mujeres fieles a Jesucristo. Soy agustino.
Soy cristiano. En este sentido podemos caminar todos juntos hacia la patria que Dios nos ha preparado.
A la Iglesia de Roma un saludo especial. Debemos buscar todos juntos cómo ser una Iglesia misionaria basada en el diálogo y siempre lista a recibir con los brazos abiertos a todos los que necesiten nuestra caridad, amor y presencia.
A todos vosotros, hermanos de Roma, de Italia y de todo el mundo, podemos ser una Iglesia que camina y busca la paz y la caridad. Así como estar cerca de los que sufren. Recemos juntos por esta nueva misión, por la iglesia y la paz del mundo".