Más de un millón de personas han huido de Ucrania desde que las tropas rusas invadieron el país el pasado 24 de febrero. Muchos de ellos son niños que llegan solos a las fronteras, ya que sus madres deciden volver a Ucrania para luchar contra la invasión con sus maridos dada la falta de posibilidades económicas para formar una vida fuera de su país.
Tan solo en la última noche, 27.000 personas han salido de Ucrania, lo que hace sospechar que esta invasión va a provocar la crisis de refugiados más grave y explosiva en Europa desde la Segunda Guerra Mundial, tal y como han advertido en la oficina del Alto Comisionado para la Ayuda del Refugiado (ACNUR).
El Alto Comisionado de ACNUR, Filippo Grandi, advierte: "Podría convertirse en la mayor crisis de refugiados de este siglo en Europa", ya que la cifra aumenta exponencialmente cada día que pasa y pronto superará los 1,5 millones de la crisis de refugiados de Siria.
Las imágenes desde las fronteras de Polonia, Rumanía, Eslovaquia y Hungría son desoladoras. Los rostros reflejan la emoción, el terror y la incertidumbre de quienes se sienten afortunados por haber logrado huir del escenario de la guerra, pero temen por una vida incierta al cruzar la frontera.
"Para muchos millones más, dentro de Ucrania, es hora de que las armas se callen, para que se pueda brindar asistencia humanitaria que salve vidas", ha aseverado el jefe la agencia de refugiados de las Naciones Unidas.
La ONU estima que la invasión de Rusia a Ucrania va a provocar más de cuatro millones de refugiados. Durante la Segunda Guerra Mundial (1939-1945) y los años inmediatamente posteriores al conflicto se produjo el mayor desplazamiento de personas durante el siglo XX, entre 12 y 20 millones de personas, que otras fuentes elevan a cuarenta millones. La dramática situación provocada por el éxodo masivo llevó a la creación de ACNUR en 1950.
Los niños, las principales víctimas del conflicto
Según informó UNICEF este miércoles a laSexta, de los más de 836.000 refugiados hasta el momento, al menos la mitad son menores de edad. Es el caso de niños como Mark Goncharuk, que logró salvar su vida gracias a la ayuda de un equipo de Reuters. Su padre no le acompañaba: "Se ha quedado en Kiev. Venderá cosas y ayudará a nuestros héroes, a nuestro Ejército, e incluso podría pelear.
La directora ejecutiva de UNICEF, Catherine Russell, ha trasladados su preocupación ante la situación a la que se enfrentan los niños y sus familias en Ucrania, que "empeora cada minuto" mientras el conflicto se intensifica y aumentan los ataques a la población civil. "Los daños en las infraestructuras han dejado a cientos de miles de personas sin agua potable ni electricidad. Las armas explosivas y los residuos de guerra en zonas pobladas son peligros reales y presentes", ha lamentado Russell, en declaraciones recogidas por el propio organismo. Además, cientos de miles de niños se encuentran en situación de desescolarización, por lo que los 7,5 millones de menores que habitan el país corren el peligro de afrontar "un riesgo mayor".